La vida es un ir y venir de emociones que muchas veces pueden cegar el camino para cumplir nuestro propósito. ¿A qué te quieres dedicar? ¿Cómo te ves en 5 años? Son las dudas que se nos presentan cuando tenemos que tomar una de las decisiones más importantes de nuestra vida laboral: qué estudiar y en dónde.
Aunque para algunos parecen ser preguntas bastante difíciles, lo cierto es que solo es cuestión de plantearse un objetivo profesional que nos sirva de brújula para aventurarnos a descubrir lo que nos apasiona y encaminar estas preferencias hacia metas factibles que puedan materializarse a corto, mediano o largo plazo.
Si te está costando trabajo responder estas preguntas y no te sientes listo para tomar una decisión, ¡no te preocupes! Aquí vas a encontrar 5 pasos que mejorarán tu visión a futuro. Quédate y descubre cómo lograr tu objetivo profesional.
1.Conócete
De nada servirá establecer un propósito si no sabemos el por qué lo elegimos. El conocerse a uno mismo es importante para muchas áreas de la vida, sobre todo porque nos hace conscientes de nuestras fortalezas, así como de aspectos en los que podemos mejorar.
Bien, pues este es el momento de ser realmente honesto contigo mismo. Déjate llevar y toma nota de lo que tu mente te diga. Los puntos clave que debes analizar son: quién soy, qué quiero y qué necesito.
Para responder la primera pregunta, debes tomar en cuenta sentimientos y habilidades, con el fin de comprender cómo impactan en tu personalidad. Una vez que eres consciente de tu forma de ser, podrás responder qué es lo que realmente quieres. Debes pensar en tus deseos, gustos, valores e intereses. Y antes de responder la última pregunta, te recomiendo que enlistes estas respuestas de mayor a menor importancia, así te enfocarás en a buscar lo que necesitas para conseguir tu prioridad número uno.
2.Establece metas
Tranquilo, aunque las metas también son algo que debes establecer a futuro, no es lo mismo que un propósito, pues estas son como pequeños escalones que irás subiendo poco a poco hasta alcanzar el objetivo final.
Establecer metas va de la mano con la pregunta sobre qué es lo que quieres. Por ejemplo, si te interesa ser CEO de tu propia empresa, primero necesitas saber de qué será esta. Si tu idea es abrir un bufete de arquitectos, entonces lo mejor será estudiar una licenciatura afín a ese sector para después especializarte en administración y negocios, con la finalidad de unificar ambas formaciones para llegar a ser el director ejecutivo de la empresa.
Estas metas deben ser pensadas para mediano o corto plazo, ya que el objetivo profesional es una visualización a futuro, de largo plazo, es decir, el propósito final al que llegarás subiendo estos peldaños.
3.Investiga
Una vez que eres consiente de tus habilidades e intereses y sabes cuál es la primera meta que debes cumplir, es crucial que no te dejes llevar por el primer instinto.
Ahora es momento de desarrollar esas áreas de interés, por lo que necesitas conocer las opciones que tienes para asegurarte de elegir la mejor, aquella que explote tu potencial.
Puedes empezar por conversar con familiares y conocidos para que te compartan cómo fue su experiencia al tomar la decisión de lo que querían estudiar, pero siempre es recomendable consultar a profesionales y páginas especializadas, así como revisar a detalle lo que las distintas instituciones y universidades tienen para ofrecerte, tanto profesional como laboralmente.
Presta atención a aquellas universidades que cumplan con tus intereses económicos e incluso sociales. Universidad IEU, por ejemplo, cuenta con becas, así como con distintas modalidades educativas para apoyar a jóvenes con la pasión de estudiar, pero que también quieran dedicar tiempo al trabajo.
¿Listo?
4.Toma acción
¡Esta es la recta final! Este es de los escalones más importantes porque aquí es cuando el resto de los pasos se mezclan para que todo lo trabajado no se quede solo en papel, dentro de la cabeza o como ideas volando.
Llegó el momento de atreverte. Recuerda que ya te preparaste para tomar esta decisión, pero si aún no te sientes en completa confianza, siempre puedes regresar a los pasos anteriores y pulirlos hasta sentirte seguro. OJO: ¡no demores tanto en exigencias! Recuerda que también estableciste metas a corto y mediano plazo, además sobre pensar puede volver a nublar el horizonte de tu objetivo profesional.
5.¡Cumple tu objetivo profesional!
¡Felicidades! Ahora que te atreviste no quieras empezar a ver los frutos desde un primer instante, recuerda que las semillas tardan en germinar. Puedes revisar tus planes las veces que quieras para mantenerte tranquilo, pero este paso es sobre todo un recordatorio de que lo más importante es que lo disfrutes. Ya has pasado por los escalones más difíciles, ahora solo falta seguir subiendo.
Para seguir enfocado en tu objetivo profesional, vuelve al punto número uno y revisa tus metas. ¿Qué sigue? ¿La maestría? Entonces, ¿qué necesitas?
Es normal ponerse nervioso ante la incertidumbre, pero, como ves, nada es imposible. Solo es cuestión de vencer el miedo y ponerse manos a la obra. ¡Ahora estás listo para lograr tu objetivo profesional! Y Universidad IEU es tu mejor aliada.
Conoce más sobre sus licenciaturas, modalidades y becas aquí. ¡Es el momento de elegir el camino que quieres!