La contingencia derivada de la pandemia de coronavirus COVID-19 ha obligado a que todos los restaurantes, cafés y bares cierren sus puertas definitivamente o que ofrezcan sus servicios solo para llevar, lo cual ha traído grandes pérdidas para esta importante industria. Sin embargo, más allá de las consecuencias económicas, es importante considerar el efecto que este suceso ha tenido en el desarrollo social.
Probablemente una de las cosas que más extrañas de la vida antes del confinamiento sea asistir a algún restaurante o cafetería con tus amigos o familia mientras pasan un rato agradable. Estar en un lugar público, cómodo y rodeado de gente, facilita la sociabilidad, que es una de las actividades primordiales para la sociedad humana. Por ello, es probable que te preocupen los cambios que se aplicarán en este tipo de actividades
El reto
La cuarentena, la incertidumbre y la tecnología han modificado drásticamente los hábitos de consumo, aunado a eso, el manejo de alimentos y la sana distancia en lugares públicos, son aspectos que se modificarán permanentemente para cuidar la salud del público. Ante esta situación, la industria gastronómica debe asumir el cambio y rediseñarse para cumplir con estas exigencias.
Medidas de higiene y distanciamiento social:
Desde la instalación de estaciones de gel antibacterial y tapetes sanitizadores hasta la obligación de garantizar las opciones de pago digital para asegurar que el cliente solo tocará su comida. La digitalización del servicio en cafeterías, restaurantes y bares es una realidad que llegó para quedarse. Si bien se trata de un servicio que se ha mantenido funcionando de manera tradicional, es un hecho que debe adoptar medios electrónicos que flexibilicen el contacto con el cliente y le permitan tomar distancia con aplicaciones que permitan realizar la orden desde el celular, pagar la cuenta, etc.
La experiencia:
El servicio de delivery seguramente es una tendencia que continuará a la alza, además de ello, la disminución del cupo en los espacios físicos y las normas de distanciamiento continuarán por un largo periodo de tiempo. Estos aspectos deben considerarse como oportunidades de innovación y buscar alternativas que mejoren la experiencia del cliente pese a todos estos cambios.
La seguridad, higiene y comodidad serán los principales elementos para garantizar la confianza y preferencia del cliente, sin embargo una grata experiencia garantizará el éxito de la reapertura gastronómica. Vivimos tiempos en los que las empresas deben asumir más que nunca su responsabilidad social y garantizar la seguridad y bienestar tanto de sus colaboradores como de sus clientes y el sector gastronómico será uno de los que más tendrá que reconvertirse con este fin, siendo uno de los más básicos en los hábitos de consumo.
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