Luly Montaño.
Secretaria Técnica.
Mi nombre es María de Lourdes Montaño Moyano y mejor conocida en IEU definitivamente como Luly, tengo 49 años bien vividos a todo lo que da, con todo el esplendor que se puede.
Soy diseñadora textil por profesión, tengo mi maestría en Administración por Universidad IEU, varios años atrás, por supuesto. Actualmente, tengo a mi cargo la dirección de la Secretaría Técnica en Universidad IEU, manejamos todo a nivel federal y obviamente en todos los estados de la República Mexicana donde tenemos presencia.
Esta sería mi tercera etapa en IEU. Llevo ya casi tres años en esta tercera etapa, feliz y agradecida con todo el acogimiento que me ha brindado Universidad IEU en cada una de ellas.
Mi historia inicia como hija, mi madre falleció apenas en la pandemia. Mi papá, gracias a Dios, todavía nos acompaña en este mundo. Luego soy hermana de dos hermanitas más, yo soy la mayor de ellas. Soy esposa de un gran hombre, la verdad en todos los sentidos, en donde él me ha apoyado en todos mis logros, mis metas. Soy mamá de dos niños, una chiquita, Fernanda, de 9 años, y Mauricio, de 13 años, donde me siento realizada en todos sentidos en ese aspecto.
Un cambio de vida gratificante
Prácticamente me he dedicado al área de la educación, aunque mi profesión es el diseño textil, debido a que estuve 15 años trabajando para la Universidad Iberoamericana, donde me dediqué de lleno a la docencia, directamente frente a grupo y apoyando en este proceso de la estructura curricular de aquel momento.
En ese mismo intermedio me invitan a trabajar en Universidad IEU como directora del plantel Puebla, esta experiencia para mí fue un gran aprendizaje que me proveyó en el crecimiento personal como profesional. Estuve trabajando en esta etapa 8 años como directora del plantel, nos tocó iniciar con la oferta de maestrías. Posterior a ello, empezamos a crecer la parte del nivel media superior, que es preparatoria y nivel superior. Salí de esta primera etapa porque quedé embarazada y me dediqué a la maternidad por completo, pero ya teníamos en aquel momento prácticamente cinco licenciaturas, el nivel medio superior, obviamente nuestras maestrías y el primer doctorado en educación.
Fueron grandes logros, grandes relaciones, grandes amistades que se hicieron con docentes, con padres de familia, con los mismos alumnos y que sin lugar a duda han ido llevando a otras etapas en mi vida.
Las buenas ideas crecen y se consolidan
Soy una mujer que no se sabe quedarse quieta, soy demasiado emprendedora en muchos sentidos. Me aboqué a la parte de la maternidad y a cuidar a mi hijo y todo esto. Pero se me ocurrió una fabulosa idea: el desarrollar una un recetario, ahora en otro rol ya como ama de casa, un recetario en donde estábamos vinculando un poquito el valor del sentimiento que genera cada una de las recetas y le quisimos dar una temática muy especial. Se llamaba: “La cuisine en tu hogar”.
Fue una revista, en la que estuvimos trabajando seis tomos diferentes. Teníamos la temática de parejas, entonces la pareja involucrada eran líderes de opinión que otorgaban esa receta y la repartíamos, hacíamos grandes eventos, incluso los invitados participaban como patrocinadores. Y la verdad tuvo muy buen acogimiento, muy buen éxito, pero llegó a la etapa en donde ya definitivamente no quise continuar con el proceso. Teníamos una sociedad por ahí y se desarrolló.
Cada etapa de la vida representa un gran aprendizaje
Posterior a ello, me vuelven a invitar a regresar a IEU, ahora en la dirección de preparatoria. por ahí me encontré a un rector que en aquel momento fue mi amigo en la etapa de dirección del plantel Puebla, hace unos 15 años aproximadamente, y me decía: pero ¿cómo vas a aceptar la dirección de preparatoria? ¿Fuiste directora de plantel como para qué te vas a ir a preparatoria? Y yo simplemente le comenté: Hoy mi vida está demandando otro tipo de aprendizaje, otro tipo de necesidades. Hoy el acercamiento que me puede brindar ese puesto en lo particular va definitivamente a detonar muchos aspectos en mi vida personal, como es el desarrollo y la educación de mis hijos.
Regresé como directora de Prepa IEU. Rompimos un esquema padrísimo porque veníamos de un bachillerato tradicional y tratamos de darle el emprendedurismo en todos los sentidos en este aspecto y hacíamos eventos realmente muy importantes para los chicos, los volvimos líderes, los impulsamos a que despertaran de sus bancas, de los pupitres y de las clases de rutina para generar empresas reales.
Entonces empezaron a desarrollar proyectos de empresas desde primero, segundo y tercer año, apostándole a lo multidisciplinar, a estar prácticamente trabajando de manera conjunta con varias materias, varios grados académicos. Resultó algo padrísimo, muy bonito, una experiencia muy linda y gratificante.
Incluso metimos el nivel de inglés no como una materia más, sino como un nivel de inglés que le diera una garantía extra al alumno. Incluimos varios talleres adicionales y complementarios para que pudieran contar con habilidades que les permitiera salir de la prepa y poder luchar por algo e inclusive por poder continuar con sus estudios. Por supuesto, no empujar esa parte siempre, pero sabemos que en el nivel de preparatoria en el cual estábamos viviendo en aquel momento, muchos de los chicos ya no seguían, no tenían la continuidad de sus estudios. Quisimos darle ese toque que les hiciera ver que ellos tienen herramientas y posibilidades para poder ser detonante a un liderazgo particular o a un emprendimiento distinguido.
Nos resultó muy bien, la verdad, y volví a salir de esa etapa. Ahí estuve alrededor de 4 años más o menos. Salí porque igual me embaracé de mi gorda y decidí abocarme a cuidarla directamente, pero la gran sorpresa y gratificante para mí es que alumnos y padres de familia se acercaron a mí porque si cambiamos mucho el esquema que se estaba viviendo, fue una experiencia muy bonita, me permitió saber y conocer que esa etapa es básica y sustancial. La etapa que estoy viviendo con mis hijos en esa edad que eran mucho más chicos era crucial para el desenvolvimiento educativo que pudieran tener nuestros muchachos.
Mi tercera etapa, mi plenitud
Ahora en esta tercera etapa en IEU es definitivamente una grandeza regresar y que me hayan vuelto a invitar en esta nueva área para mí, la parte normativa, que, aunque ya tenía relaciones con secretaría académica, definitivamente íbamos experimentando cosas muy diferentes.
En IEU hay una libertad y nunca se ha mostrado esa parte de la disposición por el género o una división en cuanto a género, en ese aspecto hay una apertura en todos los sentidos para la toma de decisiones para el desenvolvimiento que asumas en tu área de trabajo. Las oportunidades existen claro que sin lugar a dudas va a ser algo muy importante es una realidad que en varios ambientes laborales se vive la problemática del género y el menosprecio hacia la mujer, pero sin lugar a duda aquí en IEU hemos encontrado un acogimiento apertura y libertad sobre todo para poder tomar participación en la toma de decisiones sacar tus temas adelante sin ningún inconveniente.
La pasión como clave del éxito
Soy activa, emprendedora y una mujer que no se conforma con lo que tiene, prefiero dar lo mejor de mí, en pro de buscar ese cambio y ese granito de arena que siempre necesita México.
Definitivamente me apasionan mis hijos, mi vida son mis hijos. Me apasiona todo lo que hago, todo lo que se desarrolla en pro de salir adelante, de luchar por una realidad, de poder alcanzar y poder cumplir sueños, por ello el trabajo es una parte fundamental en mí. El camino está en generar nuestro propio destino.
Hoy poder estar aquí en este puesto como secretaria académica, en el que trabajo con todo mi amor, con toda mi esencia como mujer apasionada y todo lo que está dentro de mí para aportar lo mejor a IEU es lo que realmente me hace vivir, aunque existen dificultades que se presentan en la vida es bueno e increíble vivir esa esencia de los momentos en los que decimos: “se resolvió, “lo hicimos”,” pudimos” que nos hace crecer para enfrentarnos a retos más grandes.
En su gran mayoría en mi equipo tengo muchas chicas que cada una de ellas ha generado un granito de arena, para que podamos lograr más metas tanto para egresados como para alumnos y por supuesto a nivel institucional.
Ámate y sé feliz
Les recomendaría a todas las mujeres que quieren impactar su entorno como líderes que luchen, se arriesguen, ganen y habrá momentos en los que a veces lloren o rían, pero que sean felices con los proyectos que realicen y eso es lo que definitivamente va a lograr ese gran cambio, no se conformen con lo que tienen.
Quiéranse, porque a veces no nos queremos y nos fijamos en los hijos, en los hermanos, en las amigas, no retrocedemos un poquito a mirar quien está dentro de ese espejo. Es válido verte, quererte, cuidarte no nada más es una imagen, eres tú eres lo que tienes dentro y deben cuidarse no nada más por fuera, no es apariencia; va más allá de ello, va a tus valores, tus principios, todo eso déjalo salir para resaltar tu esencia y nunca olvides de lo que te hace ser quién eres.