Administradora de empresas, 10 años como Ejecutiva de Compras.
Mi historia comienza en IEU, me apasiona mi trabajo desde hace 10 años.
Desde que pasaba por fuera de las instalaciones, me inspiraba mucho la estructura y en mi pensamiento estaba que algún día iba a trabajar aquí. Hoy es una realidad y cuento con una gran trayectoria marcada por distintas etapas de mi vida.
Elegí estudiar administración de empresas porque me gusta mucho, me apasionan las ventas y actualmente emprendí un negocio con mi sobrina de ropa de temporada y artículos cosméticos, esto se debe a que realicé un estudio de mercado que marcó mucha demanda por lo femenino.
Llegar a mi emprendimiento no fue fácil, atravesé por una difícil etapa en mi vida hace 5 años, me enfermé de bronquitis y estuve internada por un tiempo prolongado que me impedía cuidar de mi hijo, dadas las condiciones le pedí al padre de mi hijo apoyo para que pudiera estar con él hasta que me recuperara. Pasaron los días hasta que me dieron de alta y mi salud se recuperó, en esos momentos lo que más deseaba era poder estar con mi pequeño de nuevo, pero para mi sorpresa, él no quiso volver a vivir conmigo. Mi mundo se paralizó al saber que estaría en casa sin mi compañero de vida, de quien cuidaba y amo, no sabía qué hacer, pensaba en muchas cosas como renunciar a mi trabajo que me hacía feliz, sentí un gran vacío que nada podía llenar.
Ante la pérdida busca ayuda
Un día de esos, me decidí por salir adelante, no podía dejar que la tristeza siguiera deteniéndome para continuar con mi vida, me enfoqué en mis responsabilidades, en pedir ayuda en la asociación “AA” que es muy conocida por apoyar a personas con adicción al alcohol, pero al acercarme a ellos me di cuenta que sus funciones van más allá de las personas alcohólicas, pues apoyan a toda aquella persona que tiene algún problema, que ha pasado por situaciones traumáticas o depresivas, en sí ayudan a todas las personas y atienden su caso. Estuve un breve tiempo, pero me sirvió mucho para darme cuenta que había un panorama más amplio de lo que creía. Mi trabajo me hizo mucho bien, me ayudó a ser más fuerte, me comprometí de lleno para dar mejores resultados y también como terapia para mantener mi mente ocupada, pero sobre todo en ese momento de oscuridad me apoyé de la fe espiritual para avanzar.
Siempre podemos aprender de nuestra situación
No comprendía del todo por qué tenía que pasar por una prueba tan dolorosa para mí al separarme de mi hijo, pero puedo decir que la lección que aprendí es que por algo pasan las cosas y la vida te va enseñando el porqué de cada cosa, me hizo valorar mucho a las personas que me rodean, que ante la cotidianidad no nos damos cuenta lo mucho que nos aportan, pero me sirvió para darme cuenta que tenía personas que me apoyaron para salir adelante como mi familia, amigos, compañeros del trabajo y de las personas que menos esperaba, me dieron palabras de apoyo para darme cuenta que había más allá.
Enfoca tu mente para crecer
Cuando empecé a comprender que mi entorno era fuerte, cambié mi actitud negativa a la actitud de ser positiva, asumir la responsabilidad de lo que conlleva y superarme, poco a poco salí adelante de esa tristeza que vivía, mantener mi mente ocupada y hacer cosas positivas me llevó a emprender. Pude ver mis habilidades para darme cuenta que sé salir adelante, no me rendí y si logré hacer más.
Entendí por qué a mí no, reflexioné sobre mi situación en la que mi hijo no vive conmigo, pero está vivo y sano, me siento afortunada de saber que está bien, agradezco la bendición de tener amigos familia, lo valoro muchísimo más, hago las cosas con amor y con mucho gusto, le agrego amor a todo lo que hago.
Cambió mi vida en un instante, ahora después de toda la experiencia puedo definirme como una mujer emprendedora, positiva, valoro las cosas que hago, soy entusiasta, tengo mucha fe en mí, en Dios y en las personas.
Gracias a mi emprendimiento logré ayudar a otras personas, es bien bonito y ahora yo puedo devolver las acciones buenas dando empleo, siempre se puede salir adelante y ver que hay más opciones que no notamos cuando nos abruman los problemas pero quiero decirte que a pesar de la situación que tengas, siempre trates de ser feliz, cuando tienes esa motivación lo transmites, y pese a que viví momentos difíciles ahora me siento más tranquila y recuperar la alegría que había perdido, actualmente veo a mi hijo lo disfruto y lo valoro mucho.
El tesoro está en vivir el presente
Les diría a las mamás que dejan de tener contacto con sus hijos por dedicar su tiempo a estar en las redes sociales, que la vida cambia en un segundo. Valoren la presencia de sus hijos, de sus etapas, disfruten a sus hijos que son pequeños, a veces se nos olvida jugar con ellos o disfrutar su sonrisa, esos momentos se guardan en el corazón. También para las mujeres les digo que se disfruten a sí mismas, que traten de ser positivas.
Les invito a que no se cansen de luchar por sus sueños, de luchar por lo que quieren, pero no se vale rendirse, las cosas ahí están, depende de que uno trabajar por lo que quieren y de verdad luchen, sean felices. Estaría muy padre llegar en 1,2,3 pero siempre hay obstáculos, habrá momentos de subir o bajar, pero todo eso es parte de construir nuestro camino para llegar a lo que queremos y debemos disfrutar el proceso.
Ante las dificultades te recomiendo nunca rendirte, pese a todo enfócate en ser feliz y alegre.
Siempre hay solución.