En otoño, el suelo del parque estaba repleto de hojas secas que caían de los árboles. El viento las revolvió en un remolino que fue creciendo hasta alzarlas.
Entonces el tiempo retrocedió…
Las hojas se elevaron lentamente y recorrieron el tronco hasta incrustarse en las ramas.
Las hojas muertas pasaron de marrón a anaranjadas, después a amarillas y finalizaron en un verde intenso y brillante.
Era primavera y el suelo del parque estaba repleto de flores preciosas que caían de los árboles…