Seguramente has escuchado aquella frase célebre de Napoleón Bonaparte que dice: “Aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla”, más adelante el poeta y filósofo español Jorge Agustín Nicolás Ruiz de Santayana dijo: “Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo”. Curiosamente, años después esta frase apareció escrita a las afueras de uno de los campos de concentración nazi de Auschwitz-Polonia: “El que no recuerda la historia seguramente la volverá a vivir”.
Ha sido tan evidente la importancia de la evaluación del pasado y el presente en la historia del ser humano, que este patrón de pensamiento no resulta sorprendente. El conocimiento obtenido a través de la historia ha servido siempre como base para la educación de las generaciones, el diseño de las estrategias sociopolíticas e incluso es de gran importancia en el desarrollo económico de cualquier sociedad.
En lo anterior radica la importancia de la figura del historiador, pues se especializa en el pasado, recopilando y organizando evidencias para documentar el acontecer del mundo. Estos profesionales son los encargados de la divulgación de los sucesos históricos, aunque además realizan un análisis e interpretación de los hechos para encontrar las leyes y las relaciones económicas, políticas y sociales que le dan explicación a la sociedad que vivimos.
Esta profesión abarca una variedad de especialidades que le permiten al historiador realizar investigaciones más específicas y profundas, sin embargo también puede apoyarse con especialistas en otras disciplinas como la psicología o la sociología, para la recopilación de datos y análisis de resultados.
Los historiadores pueden emplearse en museos, universidades, instituciones de investigación, editoriales, dependencias de gobierno, entre otros. Pero también suelen ser consultados para la elaboración de proyectos en el ramo empresarial, pues son expertos que pueden apoyar a una empresa a estructurar su historia y a partir de ello elaborar la visión y misión de la misma, construyendo la base de la identidad de la compañía.
Todas estas habilidades también pueden impulsar al historiador para lograr una exitosa carrera política, pues los conocimientos adquiridos durante la licenciatura en historia le permitirán entender la evolución y el crecimiento del sistema político, además de entender las bases y el desarrollo de las leyes del país al que pertenece.
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